En un mundo saturado de logos y estridencias, la moda silenciosa o quiet luxury se posiciona como la gran protagonista del 2025. Esta tendencia, que cobró fuerza en los últimos años y que hoy se consolida, propone una estética minimalista, elegante y sin ostentaciones, apostando por prendas atemporales, de excelente calidad y con cortes impecables.
Firmas como The Row, Loro Piana o Totême encarnan esta filosofía que deja de lado las marcas visibles para centrarse en el valor real de la prenda: su confección, su durabilidad y su estilo sobrio pero sofisticado. Incluso casas como Gucci o Valentino han incorporado colecciones más depuradas, marcando el giro hacia lo esencial.
En redes sociales, el hashtag #QuietLuxury sigue ganando terreno, y celebridades como Sofia Richie, Zendaya o Jennifer Lawrence han sido vistas con looks que celebran esta corriente. ¿La clave? Colores neutros, tejidos nobles y siluetas clásicas.
Lejos de ser una moda pasajera, la moda silenciosa refleja una nueva forma de consumo: más consciente, más selectiva y alineada con los valores de sostenibilidad y autenticidad que marcan el presente.
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